martes, 29 de julio de 2025

F-4EJ Phantom, 301 Hikotai, Lodela 1/72


 El 301 Hikotai, fue la primera unidad en recibir el F-4EJ Phantom, dentro de la reestructuracion de la JSDF de principios de los 70s, cuando se dio el importante paso de pasar de una fuerza de interceptores, equipada con F-104, a una fuerza mas flexible, equipada con la version japonesa del Phantom, un caza, con muchas mas funciones que el Starfighter.

La 301 Hikotai, comenzo con solo un par de Phantoms, destinada a la defensa de Tokio, desde la base de Hyakuri, era un cambio radical en muchos sentidos, no solo en el terreno del combate aereo, sino del industrial, cuando Mitsubishi, se hizo cargo de la produccion de un avion tan avanzado, con todas las partes fabricadas en el mismo Japon, lo que le dio un enorme impulso a la industria japonesa.


Los primeros F-4EJ no incluian muchas cosas normales en los E, como la capacidad de reabastecimiento de combustible en vuelo, armas de largo alcance y el cableado para lanzar bombas o misiles aire-tierra, tal y como establecian las reglas del Departamento de Estado norteamericano de la epoca, aunque con el tiempo, se dieron cuenta de que eran absurdas y poco a poco fue adquiriendo mas capacidad.

 Los primeros aparatos recibieron el esquema de pintura SEAC, pero con pinturas japonesas, que eran bastante diferentes a los norteamericanos, excepto el Gris claro de la panza, que es casi igual, siguiendo la tradicion japonesa, el escudo del escuadron estaba prominentemente pintado en el timon


El modelo fue producido en Japon por Revell Takara, y posteriormente por Fujimi, finalmente Hasegawa hizo un sencillo modelo en los 80 y una version soberbia a finales de los noventas.

Este modelo es de Revell Lodela, en 1/72, fue uno de los primeros modelos que decore con un esquema diferente al que tenia, basandome en el libro de Gunston, alla a principios de los 80s, usando calcomanias de mi caja de restos y pintando la rana del timon, a principios de este siglo, le repinte el timon y le coloque calcomanias de Hasegawa, la rana y el serial







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